Hacía tiempo que una manifestación ciudadana, no partidaria, no juntaba tanta gente. Después de una semana de polémica, el colectivo de organizaciones que se denominó “Vibra México” finalmente encabezó un marcha de casi 20 mil personas, que salieron desde el Auditorio Nacional hasta el Ángel de la Independencia para repudiar los ataques de Donald Trump al país y exigir gobiernos más decentes.

Como ocurrió en las masivas protestas contra el magnate que ocurrieron al otro día de su asunción en Washington DC, esta movilización también estuvo liderada por mujeres y contó con la chispa inicial de María Elena Morena, que finalmente resistió con éxito las maniobras de Isabel Miranda de Wallace para desvirtuar la convocatoria.

Según la conservadora estimación que realizó la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno de la Ciudad de México, al menos 20 mil personas se sumaron a Vibra México, sin contar las manifestaciones similares que se repitieron por todo el país. Pero más allá del número, la manifestación culminó con éxito en el Ángel sin ningún incidente. 

Al grito de “Fuera Trump” y con carteles y piñatas que ridiculizaban al magnate -pero también criticaban al presidente Enrique Peña Nieto-, miles de mexicanos rechazaron los ataques del presidente de los Estados Unidos.

Isabel Miranda de Wallace al frente de su columna, momentos antes de tener que abandonar la marcha.

Cuartoscuro

“Yo creo que México tiene muchos agravios históricos: la inseguridad, corrupción, desigualdad, impunidad, inequidad y recientemente la situación de la gasolina. No es momento de estar viendo al pasado es momento de ver al futuro y mandar un mensaje que necesitamos de soberanía, fortaleza e igualdad hacia al país vecino”, dijo el rector de la UNAM, Enrique Graue, otro de los líderes de la movilización.

El acompañamiento de la gente a su convocatoria significó una victoria frente a la “contramarcha” que intentó instalar Isabel Miranda de Wallace, presidenta de la asociación Alto al Secuestro, activista cercana al oficialismo.

Es que el colectivo “Vibra México” no sólo puso el repudio a Donald Trump como única consigna: también pidieron un gobierno transparente, honesto y efectivo en sus políticas. Wallace, en cambio, dijo que su marcha era no sólo en contra del flamante mandatario de Estados Unidos sino también en apoyo de Peña Nieto.

Como explicó La Política Online, desde Los Pinos entendieron a fuerza de sondeos que la pelea con Trump podía frenar la caída del PRI en la consideración de los mexicanos. Por eso el dirigente del PRI, Enrique Ochoa, dijo que se sumaría a la movilización.

Los números marcan que el acompañamiento estuvo con “Vibra México”: Wallace sólo reunió a menos de 1,500 personas. Al llegar al Ángel, la activista fue insultada y debió abandonar la concentración, denunciando que había visto gente "armada".  

Pero no fue la única incómoda con la espontánea manifestación. Andrés Manuel López Obrador temió que la manifestación podría tener un efecto positivo para el PRI, más allá que los convocantes de “Vibra México” hayan incluidos entre sus consignas el pedido de trasparencia y buen gobierno.

Por eso, el líder de Morena decidió hacer silencio y evitar cualquier manifestación al respecto. Su declaración políticamente correcta ya fue soltada tiempo atrás, cuando dijo que de ser necesario se alinearía a Peña Nieto ante los ataques de Trump. Pero según pudo saber La Política Online, en su entorno advirtieron que no movería un dedo para darle trascendencia a la marcha de este domingo.