Los primeros números del año confirman la misma foto que cerró el 2016. La economía mexicana crecerá de forma suave empujada por su principal motor en estos tiempos, la actividad agropecuaria. También se consolida un estancamiento de la industria, proceso que viene desde fines de 2015. 

El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), en términos anuales, tuvo un incremento real de 2.5% en enero contra contra el mismo mes del 2016, según dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Se trata de una suba de 0.3 contra diciembre de 2016.

Pero lo interesante es el análisis por actividades. Cuando se observa el sector primario de la economía, es decir al campo, se verá que tuvo un alza de 4% contra diciembre de 2016 y un impactante 11% contra enero del año pasado. El empuje agropecuario es por estos días indiscutible, como había adelantado La Política Online.

Las actividades secundarias -ligadas al sector industrial- disminuyeron un 0.3% en términos anuales y 0.1% en comparación a diciembre de 2016, precisó el organismo estadístico.

Hay que recordar que durante todo 2016, México creció 2.3%. Y que gran parte de esa modesta pero importante suba en el PIB fue traccionada por las actividades ligadas al mundo agro. Mientras que la industria se mantuvo sin cambios con respecto a 2015. Una caída relativa frente al crecimiento de 1% que había experimentado en 2015. Esa tendencia sigue.