No ha cambiado de opinión. Donald Trump volvió a hablar de la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLCAN) durante una reunión de trabajo con CEO´s que son parte del fórum estratégico y político de la presidencia para impulsar la agenda económica del republicano.

En el encuentro que tuvo lugar en la Casa Blanca, el presidente norteamericano prometió "sorpresas satisfactorias" para la comunidad empresarial, dado el "desastre" que ha sido el tratado comercial para Estados Unidos.

"[El TLCAN] es un desastre. Ha sido un desastre desde el día en que fue imaginado. Vamos a tener algunas sorpresas muy agradables para ustedes en el TLCAN", reafirmó Trump ante la comunidad empresarial, de acuerdo a lo que ha venido diciendo desde su campaña electoral del año pasado y compartiendo los objetivos de su gobierno al corto plazo.

En el mismo tenor, Trump señaló que "el costo de mantener computadoras del gobierno con 40 años de antigüedad es tan alto que podemos comprar un nuevo sistema por menos dinero". Por ello, bromeando con sus interlocutores, dijo que les daría "10 mil millones de dólares inmediatamente para reparar el sistema informático del gobierno".

De este modo, para el republicano el TLCAN o NAFTA (por sus siglas en inglés) debe ser revisado y actualizado en beneficio de los ciudadanos estadounidenses, aun si esto causa incomodidad o franca antipatía en México y Canadá, como ya está ocurriendo.

Mientras que en Norteamérica el secretario de Comercio, Wilbur Ross, ha dicho que la administración del neoyorquino está lista y "ansiosa" por iniciar las negociaciones sobre el acuerdo comercial; en México, el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, ha reafirmado en cualquier foro que ha tenido oportunidad que nuestro país se sentará a las mesas de renegociaciones con "ánimo constructivo" y voluntad de cambia, con el objeto de modernizar el TLC en beneficio de las tres naciones involucradas.