Mauricio Macri hizo un fuerte pedido a los gobernadores, jueces y legisladores para que ajusten el gasto público y reduzcan el personal.

"Ya no hay lugar para kioscos en la política", dijo el presidente en el Centro Cultural Kirchner, en donde pronunció el discurso más largo de su carrera frente a unas 170 personas, entre las que se encontraba todo su gabinete, el presidente de la Corte Suprema, los gobernadores, legisladores, la CGT y empresarios.

El presidente utilizó un tono más duro que el habitual mientras leía el discurso por medio de dos teleprompters transparentes. La redacción del discurso estuvo a cargo de Alejandro Rozichtner, Hernán Iglesias Illa y Julieta Herrero, como cada texto que lee el presidente. Aunque en esta ocasión hubo intervenciones de Mario Quintana, Gustavo Lopetegui y Fernando de Andreis. Marcos Peña hizo la revisión final y el propio Macri pidió cambiar algunas partes.

El texto final duró más de la media hora pensada originalmente y se atrasó unos minutos. En la Rosada explicaron que eso no tuvo nada que ver con la renuncia de Alejandra Gils Carbó a la Procuración General, aunque la dimisión fue tomada con "alegría" por la cúpula del Gobierno.

Tras anunciar los ejes de las reformas que enviará al Congreso, enumeró una serie de "kioscos" de la política luego de quejarse de que "en cualquier recoveco, funcionarios de todos los gobiernos, en todos los niveles, logran reubicar amigos parientes y militantes de sus agrupaciones".

Con una serie de ejemplos, Macri le exigió a todo el arco político que comience a bajar el personal.

"Un ejemplo que descubrí hace muy poco es de la Biblioteca del Congreso, que tiene más empleados que la biblioteca más grande del mundo", expresó y explicó que de menos de 500 empleados pasaron a más 1700 en los últimos años. ¿Qué ha pasado en este tiempo para que aumentara así? ¿Qué compromiso tienen con la gente quienes la administran? 1700 es un número escandaloso para una biblioteca. Es una vergüenza", dijo con una expresión de enojo.

Mirando a los gobernadores, el Jefe de Estado cuestionó la cantidad de empleados en las Legislaturas provinciales. Macri aseguró que hay algunas provincias donde la cantidad viene aumentando a 10% por año y hay legisladores que tienen más de 80 empleados. "Estoy seguro que hay muchas mejores maneras de trabajar, mucho mejores que armar quioscos para los amigos de la política", disparó.

Por otro lado, el presidente apuntó al funcionamiento del Poder Judicial. "No puede ser que en los juzgados la atención sea hasta las 13.30 horas", señaló.

"No puede ser que durante 45 días esté suspendido el servicio de Justicia", disparó contra la feria judicial. "Qué bueno que sería que la Justicia dé el ejemplo y se replantee estas interrupciones, que modernice sus procesos", exigió.

Con Ricardo Lorenzetti sentado en primera fila al lado de Marcos Peña, Macri se quejó de que "el expediente electrónico hoy no existe en la Justicia". "Los expedientes tienen 200 páginas, que se cosen, que están escritos en español antiguo, que contribuye a que la Justicia sea más lenta todavía", indicó.

Macri reservó un párrafo largo al "exceso" de sindicatos y obras sociales. "No puede ser que haya más de 3.000 sindicatos en la Argentina y sólo 600 firmen paritarias anualmente", insinuó.

 Con respecto a las universidades, el presidente advirtió que "en 10 años, la planta de personal docente y no docente aumentó en un 30%, pero la matrícula de estudiantes sólo el 13%". "Esto no se correlaciona con la tasa de graduación que es una de las más bajas del mundo", rezongó.