El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski (PPK), presentó este miércoles su renuncia al cargo en medio de un escándalo por los videos que muestran una presunta compra de votos a cambio de obras a diputados opositores para que no aprobaran su destitución.

Kuczynski renunció tras un año y siete meses, marcados por la turbulencia política y las denuncias de corrupción en su pasado como empresario. El mandatario ya había estado a un punto de ser destituido en diciembre, pero logró salvarse tras un muy polémico acuerdo con el legislador Kenji Fujimori, que derivó días después en el indulto a su padre Alberto, condenado por delitos de lesa humanidad durante su presidencia.

El Congreso peruano se preparaba para votar este jueves una nueva moción para destituirlo por incapacidad moral permanente, que se preveía mucho más pareja que la de diciembre. El mandatario había quedado envuelto en la trama de sobornos que la constructora brasileña Odebrecht pagó en la región para obtener licitaciones de obra pública.

Se trata dela misma sospecha que existe en México respecto a la campaña del PRI del 2012 con la diferencia de que en el país todavía no hay nadie vinculado a proceso ni detenido, como sí ocurre en varios de los países de la región.

La caída del presidente peruano se precipitó luego que el sector de Keiko Fujimori -la otra hija del ex presidente que está enfrentada a Kuczynski-, difundió videos y audios en los que legisladores del sector de su hermano ofrecían a uno de sus colegas de la oposición obras con el apoyo del Gobierno a cambio de rechazar la destitución de presidente.

En los videos se escucha al ministro de Transportes y Comunicaciones peruano, Bruno Giuffra,ofrecer obras a cambio de votos.

"Frente a esta difícil situación que se ha generado, y que me hace injustamente aparecer como culpable de actos en los que no he participado, pienso que lo mejor para el país es que yo renuncie a la Presidencia de la República", dijo PPK en un mensaje que grabó, rodeado de colaboradores, para anunciar su renuncia.

En la grabación confirmó que envió su carta de renuncia al Congreso y que habrá una "transición constitucional ordenada", es decir, que su cargo será asumido por el primer vicepresidente, Martín Vizcarra.

"No quiero que, ni la Patria ni mi familia, sigan sufriendo con la incertidumbre de los últimos tiempos", afirmó al presidente en un mensaje bastante firme, aunque por momentos tuvo un tono un poco robótico.

El desenlace fue inesperado. Al inicio del día, PPK no tenía planeado renunciar, según confirmaron fuentes cercanas al ahora ex presidente, señalaron al diario peruano El Comercio.

Sin embargo, el Gabinete Ministerial en pleno, incluyendo la primera ministra Mercedes Araoz, le pidieron al economista dar un paso al costado. También le advirtieron que si no dimitía, todos los integrantes del Consejo de Ministros presentarían su renuncia.

A esto hay que sumarle el hecho de que, luego de la difusión de videos, los votos a favor de la vacancia presidencial y que fueron confirmados por las diferentes bancadas parlamentarias, llegaban a superar los 100 de los 87 votos necesarios para removerlo del cargo.