Pablo Iglesias criticó duramente a Pedro Sánchez durante la presentación que hizo el presidente de su programa de Gobierno en el Congreso, donde espera ser investido este jueves.

El líder de Podemos, que tiene 42 legisladores, negocia con el PSOE de Sánchez, que tiene 123 diputados sobre 350, la formación del primer Gobierno de Coalición de la historia reciente de España.

El pasado viernes, Iglesias anunció que estaba dispuesto a dar un paso al costado y no ser vicepresidente si a cambio los socialistas cedían competencias proporcionales a los votos que su coalición obtuvo en las elecciones generales del 28 de abril.

Durante un fin de semana de negociaciones secretas entre el PSOE y Podemos, se habló de que Irene Montero, pareja de Iglesias, podía ser la elegida para ser vicepresidenta de Sánchez.

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Las negociaciones continúan en un marco de tensión, como quedó evidenciado de manera pública este lunes en el Congreso. "Respeten a nuestros 3,7 millones de votantes y no nos propongan ser un mero decorado porque no lo podemos aceptar", dijo Iglesias a Sánchez en una dura intervención en la que lo desafió a decir ante la Cámara "que es lo que les ha ofrecido" a cambio de apoyar su investidura.

"Cuando los españoles votan a diferentes fuerzas políticas quieren que nos pongamos de acuerdo. Si quisieran que su partido gobernara solo le habrían dado mayoría absoluta", recalcó el líder de Podemos. "Tiene otra opción, Sánchez, que es convocar elecciones. Si no hace un gobierno de coalición con nosotros no será presidente de España nunca", disparó.

Iglesias también reprochó a Sánchez por pedir la abstención del conservador Partido Popular (PP) y de Ciudadanos (C's) para facilitar su investidura "cuando ni siquiera hemos acabado de negociar".

En el programa presentado ante el Congreso, Sánchez urgió a poner en marcha reformas económicas, tecnológicas, ambientales, educativas y sociales para inscribir a España en la transformación digital global y reducir las desigualdades sociales.

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En cuestiones sociales, Sánchez propuso aumentar el salario mínimo; modernizar la legislación laboral para tener en cuenta el impacto de la tecnología en el trabajo; y garantizar el sistema de pensiones públicas y el empleo digno.

El debate continuará este martes antes de la votación en la que Sánchez necesitará mayoría absoluta (176 votos a favor de los 350 diputados de la Cámara). Si no los consigue el jueves habría una segunda votación, en la que el candidato socialista solo necesitaría mayoría simple.