A la mitad de las pre campañas electorales en Estados Unidos, el presidente Enrique Peña Nieto sorprendió este martes con cambios en la embajada mexicana en ese país. No dio razones, pero el tono violento que está acaparando algunos discursos de los pre candidatos se apunta como la principal razón de estas modificaciones.

A menos de un año –apenas nueve meses- del nombramiento de Miguel Básañez Ebergenyi a cargo de la embajada de México en el país vecino del norte, la Secretaría de Relaciones Exteriores anunció que será sustituido por Carlos Manuel Sada. Junto a él también llega Paulo Carreño, en lugar de Carlos Pérez Verdía, como subsecretario para América del Norte.

En un comunicado, la dependencia no dio a conocer los motivos de este cambio, pero destacó la experiencia de Solana “en el trabajo consular y en la protección de los derechos de los mexicanos en Norteamérica, así como en la defensa de los intereses de México en el exterior"

Más tarde, el mandatario mexicano negó que Basañez hubiera sido destituido como embajador y precisó que el cambio corresponde al fortalecimiento de la red consular mexicana. 

A pesar de ello, la coyuntura que vive el país que aún gobierna Barack Obama nos hace pensar que sería un motivo de peso para hacer movimientos estratégicos a nivel diplomático, en un escenario donde Donald Trump no se quedó solo con sus violentos discursos anti mexicanos y migrantes: continúa avanzando en las primarias y sus propuestas han tenido eco en otros pre candidatos para el Partido Republicano.

El especialista en temas internacionales, Rodrigo Aguilar Benignos, socio director de Aka Consulting, lo confirmó en diálogo con LPO: “los escenarios actuales, la relación bilateral, determinan osados o arrojados cambios que permitan adaptarnos a los escenarios actuales. Me refiero conconcretamente a las pre-campañas presidenciales”.

Un perfil que haga peso al tema migratorio

El embajador propuesto por Peña Nieto y que aún debe ser ratificado por el Senado, tiene un perfil que se acerca mucho al tema de mexicanos migrantes en Estados Unidos, fortalecido en su gestión como cónsul en Los Ángeles –que aún desempeña-.

La dependencia a cargo de Claudia Ruiz Massieu lo define con “una amplia experiencia en el trabajo consular y en la protección de los derechos de los mexicanos en Norteamérica, así como en la defensa de los intereses de México en el exterior”.

Además, en su trayectoria en el servicio público, ha fungido como presidente municipal de la Ciudad de Oaxaca y secretario de Desarrollo Social y Económico de dicha entidad.

Con ese historial, el especialista radicado en Washington DC, celebró los cambios: “Se ha convertido en uno de los mejores cónsules en atención a migrantes, y destaco ese punto porque creo que para allá va la motivación del cambio. Va a ser un embajador que va a saber hablar muy bien del tema en los círculos Washington, DC,  porque conoce de primera mano las necesidades de los paisanos”.

Y es que enfatiza cómo Trump se ha destacado por la violencia en sus discursos hacia los mexicanos, “no se ha andado con medias tintas y sí es un factor que tiene que ver con este cambio”.

Así, la necesidad de reforzar la embajada también orilló al nombramiento de Paulo Carreño King, con una amplia experiencia en relación con medios internacionales e instituciones académicas y empresariales.

“Esa combinación del embajador Sada con un experto en imagen que sabe muy bien cómo se mueven los círculos mediáticos, es una mancuerna que podría ser muy útil para el estado mexicano dado la coyuntura y más de allá”, consideró Aguilar Benignos.