En el mercado es natural pensar que Cemex, con una fuerte presencia en Estados Unidos, participe en la construcción del polémico muro fronterizo con México, pero hasta ahora, la multinacional había sido cauta, deslindándose de esta afirmación, conscientes del impacto negativo que provocaría.

Pero este jueves, en el evento anual que preparan con inversionistas, el Cemex Day, los directivos señalaron en su discurso inaugural que ven en la posible construcción de este muro un factor de crecimiento para la industria cementera. Sin embargo, voceros de la compañía aclararon rápidamente que el conglomerado no participará de la obra.

Hace dos semans endiálogo con La Política Online, la cementera ya  había negado su participación en la obra, "Cemex no es una empresa constructora en EU, es una empresa que produce materiales para la industria de la construcción, si alguno de nuestros clientes nos pide cotizar materiales, tenemos la responsabilidad de hacerlo, pero no implica que Cemex participaría de la obra".

Desde comienzos de año en los mercados aseguran  que más que el muro, la cementera se vería beneficiada del ambicioso plan de infraestructura que planea Trump, a través de la construcción y modernización de carreteras, aeropuertos y puentes.

"El muro impulsado por el presidente Donald Trump, sumado a un enorme plan de infraestructura impulsarían la demanda por cemento en Estados Unidos", reconocieron esta mañana sus directivos.

El comentario de hoy jueves  evidentemente causó controversia en redes y horas más tarde, la empresa indicó: "la cementera no está entre las empresas interesadas en participar en la construcción del muro de Trump, a pesar de la potencial ventaja que tal proyecto de construcción traería".

Y es que se explica que el nombre de la empresa no aparece entre las firmas listadas en el portal de Oportunidades Federales de la Administración de Servicios Generales de los Estados Unidos para participar en este proyecto.

Aunque también destacan otros factores, pues afirmaron que para este año planean reducir su deuda entre 1,200 millones y 1,700 millones de dólares y que su plan de venta de activos alcance hasta 2,500 millones de dólares.

Para México también hay proyectos que emocionan a la cementera, uno de ellos es la construcción del nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, "así como de una dinámica positiva por las elecciones estatales de 2017 y las federales en 2018, podrían ser factores positivos para el crecimiento".