La relación entre Andrés Manuel López Obrador y el sector empresarial acaso llegó a su punto más tenso luego de que Juan Pablo Castañón cancelara las mesas de análisis en torno al Nuevo Aeropuerto. Como suele ser habitual, el candidato presidencial lo acusó de haberse sometido a una fuerte presión; pero el presidente de la CCE acusó a Morena de no continuar el diálogo.

La mañana de este jueves, Castañón se defendió y aseguró que decidieron tomar esta decisión luego de que sintieran una actitud de "desaire" por parte del equipo de López Obrador: "El que sería designado para atender estos temas (Javier Jiménez Espriú) no quiso asistir a las mesas, no atendían las llamadas, prolongaban las fechas", relató el empresario.

Entrevistado por Luis Cárdenas, insistió que la discusión quedó claro en los medios de comunicación y que no existen condiciones: "Él que no quiere discutir, parece un posicionamiento de campaña sin fundamentos".

Reconoció que en parte, se tomó esta decisión tras el desencuentro que hubo con Carlos Slim, quien se mostró a favor del proyecto de Texcoco y cuestionó el de Morena, sin embargo insistió: "tenemos discutiendo cinco semanas, no han argumentado nada que tenga contenido y no cambiado su postura. Es una política de oídos sordos", se quejó.

Castañón se mostró precavido al ser cuestionado sobre si esto pintaría una relación difícil con el político tabasqueño en caso de llegar a la presidencia. "De él depende", señaló el representante de la CCE, señalando que aún esperan los debates y que los candidatos tengan propuestas claras.

La aceptación de realizar una mesa de debate en torno al nuevo aeropuerto generó un fuerte disgusto entre el empresariado, que derivó en el quiebre total en la posibilidad de este diálogo. Ese malestar lo reforzó la Coparmex, resaltando que sería "ocioso" dicho diálogo.

Entrevistado en el mismo espacio, Gustavo de Hoyos, presidente de esta confederación patronal, criticó que la idea en que surgió esta mesa "no fue la más reflexiva". Agregó: "Ya está definida la postura de los candidatos y la postura "unánime" del sector privado, resulta ocioso profundizar más en un debate que se ha explorado en lo técnico y financiero".

Ambos líderes empresariales coincidieron en que era momento de "darle vuelta a la página" y que había temas mucho más importantes en la agenda nacional que el del Aeropuerto.