Ante la realidad de que Javier Duarte no logrará ser considerado perseguido político y asilado en Guatemala ahora sus abogados van por el Plan B: cómo ocultar los recursos que sustrajo del erario de Veracruz y cómo devolver la menor cantidad posible al Gobierno federal.

 Son varios los mensajes que han quedado desde su captura que hacen suponer una posible negociación de Los Pinos con el inculpado. Uno de ellos es la liberación de su esposa Karime Macías, que se autoexilió a Europa. Curioso: pudo viajar desde Centroamérica a Londres sin que las autoridades pusieran objeción o siquiera definieran que no podía salir del país porque era testigo de los hechos dado que estuvo con Duarte todo el tiempo.

De acuerdo con las leyes mexicanas cuando una persona está sujeta a investigación no puede salir del país, y tiene una guardia restringida alrededor de ella, en este caso la mujer de Duarte de Ochoa, salió de México, pese a que había indicios de que formaba parte de la red que desvió los recursos financieros en Veracruz. Karime es un actor fundamental de la saga y que todavía podría no haber llegado a su punto decisivo.

Por otra parte México no gestionó de manera informal al Gobierno guatemalteco la expulsión inmediata de Duarte, y por el contrario, sostuvo que iba a oficializar la petición de extradición. Aquí también hay zonas grises: a la fecha la SRE no ha concretado el tramite lo cual le otorga tiempo al acusado. 

Esto pone en riesgo el proceso mismo a través de algunas pruebas que se pueden desvanecer, inclusive que los cómplices del inculpado se pudieran escapar, y que ello haga más difícil comprobar la delincuencia organizada, que es el único delito por el cual estará en la cárcel en México. 

Hay muchos paralelismos entre caso Oceanografía y el caso Duarte. La apuesta es la misma: que los acusados pasen en la cárcel solo lo necesario y que no deban regresar nada al Gobierno.

El experto en derecho internacional Jorge Lara Rivera dijo en entrevista con LPO, que la justicia se aletargó en las horas y momentos críticos, lo que dio tiempo para que las cosas se enfriaran dando paso a la desconfianza y especulación con respecto a una posible negociación entre las partes.

"En las horas críticas de la detención, yo quiero suponer que hubo una valoración estratégica por parte del Gobierno mexicano, y en este caso, dada la relevancia, se tuvo que haber privilegiado la rapidez. Creo que lo más conveniente es haber pedido de manera informal al Gobierno de Guatemala: ‘Lo tienes tú, está en tu territorio de manera ilegal, aplica tu ley migratoria', y la ley migratoria de Guatemala es muy clara procede la deportación".

Subrayó que la liberación de Karime Macías es trascendente pues la mujer tenía información muy valiosa con respecto a la red de corrupción que había en torno del ex Gobernador.

"Eventualmente la Procuraduría General de la República tiene que ser muy clara en la toma de estas determinaciones. Pudo haber sido,- no la sabemos a ciencia cierta-, que tomara a su esposa como informante o testigo protegido, o bien que el Gobierno de México, por toda la información que podría tener Duarte quisiera aletargar las cosas", dijo el experto.